Esto refleja un problema de civismo que afecta a nuestro municipio. Mantener el espacio público limpio y ordenado es responsabilidad de todos.
La acumulación de basura y el mal uso de los contenedores no solo perjudica la estética del entorno, sino que también puede tener repercusiones en la salud y el bienestar de los vecinos.
Es fundamental fomentar una cultura de respeto hacia los espacios compartidos, promoviendo la educación ambiental y la conciencia sobre la importancia de reciclar y desechar adecuadamente los residuos. La colaboración de los ciudadanos es clave para mejorar la situación y crear un entorno más agradable y saludable para todos.
SE RECUERDA QUE PARA DESECHAR LOS ENSERES DEBE REALIZARSE DE MANERA CORRECTA EN EL PUNTO LIMPIO
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